Mitos alimenticios durante el tratamiento del cáncer

Muchas personas diagnosticadas de cáncer buscan información adicional sobre los aspectos alimentarios que podrían modificar para combatir la enfermedad. Investigan en ocasiones de fuentes poco fiables los productos, las cocciones, los utensilios o los hábitos que podrían ser perjudiciales o que podrían tener efecto en la enfermedad. Esto puede generar una sobreinformación e incluso una cierta sensación de angustia al desconocer realmente lo que es cierto y lo que no.

Existen muchas creencias populares erróneas que relacionan el cáncer y la alimentación. Muchos de esos “ mitos” se basan principalmente en recomendaciones dietéticas dirigidas a la población general, destinadas a prevenir la aparición de enfermedades relacionadas con unos malos hábitos alimentarios, pero no tienen nada que ver con lo que se recomienda para una persona en tratamiento de cáncer.

No hay alimentos o ingredientes que por sí solos curen el cáncer o, de lo contrario, empeoren su progresión. Lo que sí existen son dietas o patrones de alimentación más recomendados, como seguir una dieta suficiente, variada y equilibrada.

Mitos acerca de....

Dos trozos de carne roja y perejil

Consumo de carne roja

No hay ninguna evidencia que justifique eliminar de la dieta el consumo de carne roja. Dentro de una alimentación equilibrada la carne roja puede estar presente hasta dos veces por semana (eligiendo siempre las partes más magras) y la carne procesada de forma ocasional.

Productos lácteos

Consumo de lácteos

Los lácteos son totalmente seguros. Un consumo adecuado corresponde a 2-3 raciones al día, por lo tanto, no se deben excluir si no es por prescripción médica. Se pueden elegir las versiones más bajas en grasa en función de cada necesidad.

Terrones de azúcar

Consumo de azúcar

Hay que limitar —pero no necesariamente eliminar— todos los alimentos muy ricos en azúcares, porque una ingestión excesiva podría comportar un aumento de peso no deseado. Los edulcorantes artificiales son seguros, pero si el especialista no los ha recomendado, no hay que incluirlos en la dieta.

Mitos acerca de...

Frutos rojos

Alimentos “buenos”

El ajo, el té verde, los frutos rojos o la cúrcuma son alimentos con estudiados beneficios sobre la salud. Consumirlos es totalmente seguro y, por lo tanto, se pueden integrar de forma habitual, pero no excesiva, dentro de una alimentación variada y equilibrada que incluya también otras.

Mano sosteniendo pastillas amarillas

Suplementos

Una dieta suficiente y equilibrada proporcionará las cantidades adecuadas de vitaminas, minerales y antioxidantes que el cuerpo necesita. Así pues, no se recomienda tomar ningún suplemento o complemento (vitaminas, minerales, hierbas, aceites esenciales o de cualquier otro tipo) sin consultarlo previamente con el especialista.

Signos de interrogación rojos

Dietas “anticancerígenas”

Algunas dietas alternativas específicas basadas en la eliminación de grupos de alimentos, no solo no contribuyen a la mejora del pronóstico del cáncer, sino que pueden comprometer el estado nutricional de los pacientes. Solo el médico puede recomendar una u otra dieta para cada caso particular.

Mitos alimentarios en cáncer de mama